Viajes en grupo a
Sri Lanka y Maldivas

Etapa 1

Comenzamos nuestra aventura sumergiéndonos en el espíritu costero de Negombo, un centro comercial histórico rodeado de una fascinante red de canales repletos de vida rural. Podremos tumbarnos en la playa de Negombo y empezar a disfrutar del Océano Índico mientras seguimos conociendo a nuestro grupo y planeamos dónde ir a probar por primera vez la cocina de Sri Lanka.
En la siguiente etapa, nos adentraremos en el corazón de la isla. Nos espera Anuradhapura con sus pagodas y ruinas Patrimonio de la UNESCO. Entre las grandes estupas, la ciudadela y los monasterios veremos el viejo y sagrado árbol Bodhi, un recordatorio espiritual de los comienzos del budismo en Sri Lanka. Nos dirigiremos a Dambulla, hogar de templos de cuevas decoradas con colores vivos y repletas de figuras de Buda. Desde ahí vamos a explorar las maravillas naturales y sitios históricos que rodean esta área como Sigiriya, un colosal monumento de piedra que alberga una fortaleza en ruinas.

Otro de los tesoros de esta zona son las maravillosas ruinas casi milenarias de Polonnaruwa. Diremos adiós a la antigua capital de Ceilán para dirigirnos a la capital cultural de la isla, Kandy. Una ciudad agradable rodeada de verdes colinas, que alberga un pintoresco lago, tiendas antiguas y un bullicioso mercado. También observamos cómo los lugareños adoran en Dalada Maligawa (Templo del Diente) de Kandy.

Etapa 2

En la segunda etapa del viaje, recorremos el paisaje de las tierras altas, con suerte en tren, sintiendo la brisa de las montañas mientras vemos el paisaje maravilloso de Nuwara Eliya. Montañas, selva, túneles y campos de cultivo de té verde brillante. Realizaremos algún trekking por la zona como el del mirador del «Fin del mundo«, con una caída en vertical de 800 metros donde disfrutaremos de las vistas, o el del Pico de Adán, dónde compartiremos subida con los peregrinos hasta la cima de la montaña más alta de Sri Lanka.

Llega el momento de disfrutar de la naturaleza en algunos de los reservas del país. Como el parque natural de Yala o Udawalawe donde intentaremos avistar al imponente y escurridizo leopardo y nos sorprenderemos de contemplar a escasos metros a animales salvajes como elefantes, búfalos de agua, cocodrilos, ciervos y una incontable cantidad de aves. ¡Una experiencia inolvidable!

Etapa 3

En los últimos días del viaje, recorreremos el arco del litoral sur de la isla donde nuestro primer objetivo será hacernos con un coco y tumbarnos en una hamaca. Nos esperan playas de aguas claras y puntos de buceo donde descubrir arrecifes alucinantes y vida submarina, como enormes tortugas. Dondra es el punto más austral de la isla de hecho no hay otra tierra al sur hasta llegar a la Antártida. Cerca nos encontraremos con Galle, la vieja ciudad colonial, donde se encuentra la Costa de Weligama, lugar conocido por los pescadores que se subían a unos palos hincados dentro del mar.

Pasaremos los últimos días en Colombo, paseando por el bazar y disfrutando de las vistas del paseo marítimo lleno de vida. La ciudad es una mezcla cosmopolita de mercados callejeros, edificios coloniales, museos interesantes, excelentes restaurantes y excelentes oportunidades de compras.

Etapa 4

Seguimos nuestro viaje... ¡Maruhabaa a Maldivas! Va a ser difícil que desde el avión no te quedes con la boca abierta con este pequeño, remoto y poco conocido paraíso del Océano Índico: atolones por donde mires, aguas turquesas que se confunden con el azul del cielo y arenas blancas.

Nos espera la isla de Dhigurah, el mejor lugar del país para nadar, hacer snorkel o bucear con tiburones ballena y mantas rayas gigantes. La isla lo tiene todo: dos playas de más de 3 kilómetros de longitud de aguas cristalinas y palmeras, un arrecife de coral donde hacer snorkel tranquilamente,...

Etapa 5

Cogermos un ferry hasta el atolon sur de Malé, dónde podremos escoger entre pasar unos días en Gulhi una pequeña isla con ambiente local y poco turismo, un lugar perfecto para descansar y desconectar unos días. O Maafushi el centro de los viajes mochileros del país. Ambas islas son perfectas para disfrutar de la playa y hacer snorkel u otras actividades acuáticas en nuestros últimos días en el paraíso.

Pondremos fin a nuestro viaje entre recuerdos de peces de todos los colores y tamaños, playas idílicas y las puestas de sol más bonitas del mundo. ¿Preparado?