Viajes en grupo a
Japón - Extendido

Etapa 1

¡Konnichiwa! Bienvenidos a Japón, empieza la aventura y nos dirigimos a Nikko. A sólo dos horas de Tokio, encontramos esta aldea de montaña patrimonio de la Humanidad.

La siguiente etapa la emprenderemos dirección Kanazawa, en la costa del mar de Japón. Y mientras descendemos hasta Nagoya iremos recorriendo los conocidos alpes japoneses: paisajes montañosos, pueblecitos medievales que guardan tradiciones milenarias… como Shirakawa o Takayama, de los paisajes más pintorescos de Japón.

Recorreremos también la ruta que une Tsumago, uno de los pueblecitos mejor conservados: ruinas del castillo, tiendas ancestrales, calles intactas… y Magome, otra ciudad de posta de la ruta que unía Tokio con el resto del país, en la ruta de Nakaseando.

Etapa 2

Llegamos a Osaka como base para los siguientes días. Desde ahí visitaremos Kioto, cuyo nombre original era «capital de la paz y la tranquilidad». Kioto es considerado como el corazón cultural de Japón y una de las ciudades estrella del país. Visitaremos castillos, palacios, mercados artesanales… y con suerte veremos geikos (geishas) o maikos (aprendices de geishas) con sus elaborados vestidos y maquillajes.

Otra ciudad interesante es Nara, la antigua capital de Japón, llena de templos, pagodas y santuarios. En sus parques podremos ver la típica postal de los ciervos paseándose entre los turistas que les dan comida.

Etapa 3

De allí, partiremos a Hiroshima, la ciudad conectada inevitablemente con la Segunda Guerra Mundial y la bomba atómica. Visitaremos la isla de Miyajima, hogar del venerable santuario sintoísta de Itsukushima, famoso por su enorme puerta de color naranja brillante (tori) que se eleva majestuosamente fuera del mar. Se considera uno de los lugares más bonitos de Japón. Y de ahí, empezaremos la vuelta hacia el norte.

Etapa 4

Llegaremos a la increíble capital de Japón, Tokio, hay muchos para explorar: museos fascinantes, tiendas, energía bulliciosa y arquitectura futurista, vestigios del pasado, con templos históricos en algunos los lugares más inesperados, así como una gran cantidad de parques y jardines, especialmente exquisitos en primavera cuando los cerezos y las azaleas están en flor. Pasaremos los tres últimos días en Japón. ¡Sayonara, y hasta la próxima!